“Para el que valore el tiempo, el servicio aéreo es indispensable y hay que darle el valor que se merece”. “Un aeropuerto salva vidas”
Estas no son palabras mías, son frases de algunos de los administradores de los aeropuertos que cuidan y vigilan las terminales aéreas correspondientes a la Regional Antioquia, dirigida por Carlos Arrubla.
Hablamos de nueve aeropuertos ubicados en los municipios de Urrao, Nuquí, Amalfi, Cimitarra, Puerto Berrío, Remedios, Condoto, Ciénaga de Oro y Montelíbano.
El compromiso y el cariño que se siente por estos lugares, sorprende cuando se entrevista a los administradores de estas terminales.
Jairo Barrientos, del aeropuerto Reyes Murillo de Nuquí Chocó, se deleita hablando sobre cómo gracias a esta terminal, han salido más de 178 toneladas de alimentos como el famoso Pargo Rojo que lo envían hacia Medellín y Quibdó, generando empleo y buena comida en la mesa de los colombianos.
Alvaro Restrepo, de Urrao, se siente orgulloso por dirigir el aeropuerto, Alí Piedrahíta el más grande de la región.
Nohora Carmen Pinto y su parner en Remedios, Sol Mélida Escobar, tienen claro que el aeropuerto Alberto Jaramillo Sánchez, ubicado en la vereda Otú de este municipio, salva vidas.
Neyvi Rentería, una mujer que inspira alegría y cultura, le apuesta para que el aeropueto Mandinga de Condoto Chocó, sea uno de los que primero cumpla con los protocolos de bioseguridad.
“Hay que darle el valor que se merece” es la frase y lo que piensa Jose Barrientos, administrador del aeropuerto Morela en Puerto Berrío.
Isabel Cristina Lobo, tiene dos aeropuertos: el Pindo de Montelíbano y el Berasteguí de Ciénaga de Oro. Para ella éstas terminales van de menos a más y ese es su objetivo.
Y Amalfi, con su administradora Gloria Montoya y su hombre de confianza Obed de Jesús, tienen claro que el aeropuerto El Río es la tabla de salvación para todas las aeronaves que pasan por este espacio aéreo y saben que abajo, en la tierra, El Río les daría la opción ante una emergencia.